Analizamos la polémica generada en la negociación y el resultado final del convenio colectivo del fútbol femenino en España.
En octubre de 2018 se iniciaron las negociaciones entre las partes para firmar el primer convenio colectivo del fútbol femenino profesional en Europa. Tras más de 16 meses de negociaciones y con una huelga de por medio el pasado 18 de febrero de 2020 se firmó este primer convenio colectivo en el fútbol femenino.
En las primeras reuniones, celebradas en la sede del Consejo Superior de Deportes (CSD) participaron la Asociación de Clubes de Fútbol Femenino y los sindicatos UGT, Futbolistas ON y AFE. Tras más de una decena de encuentros no se alcanzó un acuerdo que cubriera las necesidades de las jugadoras, principales interesadas en la firma de este acuerdo. Tras esta primera ronda de contactos fallida, el fútbol femenino español en su totalidad se puso en huelga llegando a parar la liga Iberdrola en el mes de noviembre de 2019. A efectos de esta huelga el 20 de diciembre la ACFF, (AFE) y el sindicato Futbolistas ON firmaron un preacuerdo de la Mesa Negociadora del I Convenio Colectivo del Fútbol Femenino para las jugadoras de Primera División. En este primer preacuerdo se fijaron las bases en algunos de los temas de mayor relevancia como el salario mínimo, la maternidad, la duración de jornada o las vacaciones. La Federación Española de Fútbol dio el visto bueno a este texto en una primera instancia. Pero más adelante cuando el convenio tuvo que hacerse efectivo la situación se volvió a bloquear.
La Federación bloquea el convenio en desacuerdo con la AFE por la entrada del fútbol femenino en el programa élite federativo, este programa permitiría a la patronal disponer de los fondos económicos necesarios para hacer frente a las condiciones pactadas con AFE y Futbolistas ON. El principal problema que planteaba el convenio era la financiación de esas mejoras salariales que percibirían las jugadoras en el caso de firmarse el mismo. La teoría era sencilla, adherirse al programa élite de la federación para incrementar hasta 500.000€ por equipo los ingresos obtenidos ahora por derechos televisivos con Mediapro. En la práctica esto supuso un importante escollo en las negociaciones.
Finalmente el 13 de febrero de 2020 se alcanzó un acuerdo con Mediapro en lo referente a los derechos televisivos del fútbol femenino español, acuerdo ratificado por La Asociación de Clubes de Fútbol Femenino (ACFF) el 18 de febrero del mismo año. Por primera vez en Europa los derechos de las jugadoras profesionales de fútbol quedaban reflejados en un convenio que esperemos sirva de lanzadera para el fútbol femenino en los próximos años.
En lo referente al contenido propio del convenio, es necesario destacar algunos aspectos de gran relevancia:
- El convenio tiene carácter retroactivo, lo que implica que se aplica desde el 1 de julio de 2019.
- Prórroga automática: el convenio se prorroga por periodos de una temporada siempre que no sea denunciado por alguna de las partes al menos tres meses antes de su vencimiento.
- Se establece un salario mínimo de 16.000€ brutos anuales y se obliga a los clubes a que todas las jugadoras que tengan contrato a tiempo parcial, lo tengan como mínimo al 75% de la jornada.
- Protocolo de maternidad: se establece la obligación de que en caso de que una jugadora quede embarazada, esta podrá acceder automáticamente a una renovación de su contrato.
- Se fija una jornada laboral de 7 horas diarias, 35 horas semanales con un día y medio semanal de descanso, además de 30 días de vacaciones.
En definitiva estas y el resto de medidas adoptadas en el convenio vienen persiguiendo un impulso del fútbol femenino en España, un impulso que acerque a nuestras jugadoras a una igualdad real entre fútbol masculino y femenino, esta igualdad, que a día de hoy, en términos absolutos parece imposible, se encamina con la firma de este acuerdo y el posicionamiento de nuestras jugadoras a la vanguardia de los derechos laborales de las futbolistas en Europa.
Fernando Escudero es especialista en Derecho Deportivo y Gestión del Deporte. Es graduado en Derecho y alumno del Master en Derecho Deportivo Europeo (2020).
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